Vuelvo a dirigirme a vosotros para comunicaros que mi bóxer ha fallecido. Tuvimos que cortar sus dificultades respiratorias, que aparecieron de repente el sábado por la noche, y sufrió una hemorragia interna. La chlorella le hizo mucho bien, había recuperado el apetito y las ganas de jugar, pero desgraciadamente este tumor del bazo fue fatal. La separación forzosa es terrible.
Ni que decir tiene que podéis publicar mi testimonio. Mi «poppet» se fue a lo grande gracias a la chlorella, fue increíble, el pelaje suave, la nariz de nuevo pigmentada, etc. Fue un verdadero placer volver a verle.